Zaragoza, España, proyecta convertirse en Smart City con transporte de baja huella de carbono y ejemplo de movilidad sustentable tan pronto como en 2030.
Zaragoza continúa desarrollando su innovador esquema de movilidad sustentable para encabezar las ciudades sostenibles a nivel global como una Smart City donde el transporte de baja huella de carbono quede bien establecido rumbo a 2030 con ciclovías, tranvías y autobuses eléctricos.
Aquello que técnicamente se conoce como “una ciudad climáticamente neutra” significa impulsar la electromovilidad, la movilidad no-motorizada y un transporte público diseñado para sacar el máximo provecho posible a las energías limpias. Ahora, Zaragoza anuncia la ambiciosa meta de expandir sus corredores Cero Emisiones con la compra reciente de 68 autobuses eléctricos operados por Avanza, uno de los brazos operativos de MOBILITY ADO en Europa.
Se trata de modelos Irizar ie Tram, cuya tecnología de alimentación energética consiste en pantógrafos, o estaciones de recarga eléctrica, para recargar las baterías de los autobuses en cuestión de minutos sobre el recorrido y llevar la autonomía por arriba de los 300 kilómetros. El interior de cada uno de estos vehículos eléctricos puede albergar hasta 105 pasajeros.
Asimismo, cada uno de estos Irizar ie Tram contempla una vida útil superior a los 15 años; de modo que las autoridades de transporte público planean continuar nutriendo la flotilla de autobuses eléctricos en 2023 para así lograr un sistema de movilidad descarbonizado en 2030.
Sin embargo, la movilidad sustentable en Zaragoza no se agota con la electromovilidad: esta Smart City ha optado por la redistribución de la movilidad urbana entre un 50% de traslados a pie o bicicleta, un 25% mediante transporte público y el restante 25% en automóvil privado con vistas a ir reduciendo este último rubro. Vale recordar que desde 2005 la expansión del servicio de tranvía derivó en una reducción del tráfico vehicular de casi 30% en 2012.
En el terreno de las ciclovías y de la promoción de la movilidad saludable, la introducción de la legislación que limita en 30 kilómetros por hora la circulación vehicular en varias calles también ayudó en establecer un sistema de incentivos para que los habitantes de Zaragoza opten por pedalear sobre conducir. Esto, de la mano de nuevos sistemas de bici compartida y el proyecto para establecer biciestacionamientos. Así se liberaría espacio urbano de aceras para peatones.
Finalmente, Zaragoza ahora mismo sigue esforzándose por ser ejemplo de ciudades sostenibles con el desarrollo de ZUM: un app para integrar múltiples modos de transporte, (transporte multimodal), con el fin de planear viajes personalizados con información en tiempo real. De esta manera, Zaragoza en tanto Smart City afianza sus diversas estrategias de movilidad sustentable rumbo a 2030.