Cultura del tránsito: Una visión general para promover la educación vial
La educación vial, o cultura vial, es tan importante como la educación física o la educación reproductiva: de su práctica depende la creación colectiva de un espacio seguro de respeto a los demás en calles, avenidas, carreteras y autopistas.
La educación en seguridad vial en México tampoco es tema menor. Según el INEGI, más de cuatro mil personas en nuestro país perdieron la vida en 2022 por accidentes de tránsito. Por ello la práctica de la educación vial empieza con el aprendizaje de niñas y niños.
¿Qué es la educación vial?
Educación vial es toda instrucción cuyo aprendizaje y práctica no solo permite prevenir accidentes en la vía pública, sino también concientizar por igual a automovilistas, ciclistas, pasajeros y peatones sobre sus responsabilidades y derechos, con el fin de crear y promover una cultura de seguridad vial en las calles.
¿Cuáles son los objetivos de la educación vial?
- Ayuda a prevenir choques y siniestros en la vía pública
- Fomenta valores como diálogo y tolerancia considerando que la vía pública es de todos
- Hace conciencia de derechos y obligaciones al usar calles, ciclovías, andadores y más
- Promueve una movilidad sostenible y amigable con el medio ambiente
- Logra un cambio de paradigma en cuanto al ver al espacio público como una extensión de la casa, la escuela y el lugar de trabajo
- Previene aglomeraciones en centros urbanos y descongestiona las vías públicas
- Reduce el mal humor del tráfico promoviendo una nueva cultura de la movilidad
La cultura vial en México: ¿vamos mal o vamos bien?
Tan solo en el 2016 un millón 350 mil personas fallecieron a causa de accidentes de tránsito a nivel global por falta de cultura vial, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS). En su Global Status Report on Road Safety 2018, México aparece junto a países como Estados Unidos, Suiza o Suecia en cuanto a contar con un confiable registro nacional de accidentes de tránsito: el del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Afortunadamente las cifras de INEGI señalan una reducción sostenida desde el 2011 en términos de víctimas fatales, pues se pasó de siete mil 994 a cuatro mil 227 en 2022.
Sin embargo, y aquí es donde entra el factor de la educación vial en México, la OMS indica que el país carece de una política nacional en cuanto a:
- uso obligatorio de cinturones de seguridad al interior de los vehículos
- uso de cascos para motociclistas y ciclistas
- restricciones de niños ocupando asientos delanteros
- prohibición del uso del teléfono al conducir.
Paulatinamente, empresas y gobiernos locales están adoptando una cultura de calles seguras para proteger vidas. Mientras DiDi, la empresa china de movilidad urbana, inició un ambicioso programa de educación vial para sus socios repartidores, el gobierno de la CDMX lanzó un curso en línea para saber ¿qué tan bueno eres para manejar?
Aprendiendo a movernos desde temprano: educación vial para niños
Ahora bien, ¿debemos esperar por campañas masivas de educación vial para comenzar su aprendizaje y su práctica en nuestro entorno familiar? La respuesta es no.
Podemos aportar desde nuestra trinchera con educación en seguridad vial para niñas y niños, enseñándoles usar equipo de protección personal al montar su bicicleta o scooter y hacer alto total antes de cruzar una calle para mirar a ambos lados.
En la medida en que nosotros seamos los tutores de la cultura vial de los pequeños, ellos aprenderán a prevenir accidentes siendo conscientes de que un tránsito más seguro comienza en el momento mismo de salir de casa.
En México ya se están tomando medidas para introducir a los niños a la educación vial. Por ejemplo, en ciudades como Tulum y Tulancingo, los gobiernos imparten cursos sobre seguridad vial en escuelas primarias, donde les enseñan hábitos básicos en su camino a la escuela y en la interpretación de señales de tráfico.
En definitiva: más educación en seguridad vial para todos
La educación vial, definida como las prácticas aprendidas desde el respeto a los demás con el fin de convertir la vía pública en un espacio seguro, es la mejor prevención contra el ruido de semáforos y las caras de enojo en cruces peatonales que suelen caracterizar las ciudades de México. Usar cinturón de seguridad, no invadir ciclovías y usar casco al andar en moto son solo el inicio de un cambio en la cultura vial para evitar accidentes y promover el bien común.
Evitar accidentes partiendo de la consciencia de que la vía pública es de todos es el propósito y beneficio de la educación vial. ¿Cómo crees tú que podemos seguir aprendiendo y practicando la cultura vial desde nuestro entorno próximo?