Los autobuses eléctricos son movilidad sustentable combinando electromovilidad y transporte público cuyo mercado global seguirá prosperando casi al 50%.
El mercado de los autobuses eléctricos en el mundo crecerá sostenidamente al 43.1% de 2024 a 2027 consolidándose como uno de los desarrollos más difundidos de electromovilidad aplicada al transporte público, según las últimas proyecciones del sitio especializado ResearchandMarkets.
“El tamaño del mercado global de autobuses eléctricos pasará de las 81 mil unidades actualmente a más de 704 mil durante los próximos seis años”, indica el reporte añadiendo que este crecimiento estará impulsado por la innovación en los campos de las baterías de litio y de los trenes motrices.
En Europa, se calcula que Francia será el líder en la descarbonización y la electrificación del transporte público: desde 2018 la autoridad de París e Ile-de-France (RATP por sus siglas en francés) lanzó la licitación para adquirir 800 autobuses eléctricos. Esto, con miras a cumplir su meta de lograr para 2025 una flota de cuatro mil 700 vehículos de cero emisiones contaminantes.
De 2022 a 2023 la cifras en el Europa son positivas, ya que fueron registrados dos mil 62 autobuses eléctricos para los países europeos occidentales incluyendo a Polonia.
Pero no todo es Europa. Y es que en India el gobierno del segundo país más habitado del mundo anunció apoyos de hasta el 40% en el costo de cada autobús eléctrico destinado para la movilidad urbana con el propósito de reducir la huella de carbono. Esta medida podría cuadruplicar la flota actual de electromovilidad hasta las casi cinco mil unidades.
Si observamos el crecimiento total proyectado del mercado global de autobuses eléctricos por región, hallaremos lo siguiente: Norteamérica acumulará el 12%, Europa el 14%, Asia-Pacífico el 57%, América Latina el 10% y África y Medio Oriente el 7%.
El avance de la demanda global por el autobús eléctrico en próximos años está explicado por la voluntad política para lograr una movilidad sustentable mediante un transporte público de baja huella de carbono. Distintos países están reformando su legislación para combatir la contaminación mientras que más y más personas piden los beneficios de una combinación entre electromovilidad y transporte público.