Desde 2019 el centro de desarrollo tecnológico Tecnalia presentó el primer prototipo de coche volador o taxi aéreo en España, el cual técnicamente es una aeronave eléctrica de despegue y aterrizaje vertical: VTOL (Vertical Take-Off and Landing).
Dos años después, Tecnalia ha formado una alianza estratégica con el operador de infraestructura Ferrovial para poner en marcha 20 helipuertos para coches voladores, también llamados “vertipuertos,” por su despegue y aterrizaje vertical. En el proyecto también está el gigante aeronáutico Airbus.
El prototipo de Tecnalia representa un avance en el campo de la movilidad aérea urbana: su cabina tiene capacidad para un pasajero y desarrolla velocidades de hasta 90 kilómetros por hora a distancias de 15 kilómetros, idóneas para conectar centros urbanos con grandes aeropuertos. Este prototipo está adaptándose para dar cabida a cuatro pasajeros y alcanzar una velocidad máxima de hasta 200 kilómetros por hora.
Este taxi aéreo español tiene la peculiaridad de volar con cuatro propulsores autónomos similares a los drones, motorizados eléctricamente. Es decir, cero emisiones contaminantes.
Según la ficha técnica de Tecnalia:
“Cada uno de estos cuatro propulsores tienen controles completamente autónomos, lo cual brinda a esta aeronave los atributos de estabilidad, eficiencia, precisión y controlabilidad con el propósito de que sus pasajeros tengan un traslado tranquilo, parecido a abordar un coche convencional.”
Se contempla que el prototipo final de taxi volador de Tecnalia finalmente surque los cielos españoles con regularidad hacia el 2025. Esto coincide y va a tono con las tendencias de movilidad aérea en otras partes del mundo, como Estados Unidos, donde United Airlines anunció que usará 200 aeronaves eléctricas eVTOL, también de aterrizaje y despegue vertical.
Sin duda España aguarda impacientemente los desarrollos de autos voladores de Tecnalia. Mientras tanto, este centro de desarrollo tecnológico también registra progresos de cara al primer autobús autónomo sin conductor para conectar el centro de Málaga con el puerto ante el arribo de cruceros de turistas.