¿Qué es un cenote y cuáles son los mejores en México?
México es un país que está rodeado de bellezas naturales, no por nada tiene una de las siete Maravillas del Mundo: Chichén Itzá. Además de esto, tiene increíbles pozas naturales en las que puedas nadar y sumergirte a sus aguas cristalinas: los cenotes. Pero ¿qué es un cenote y cuál en México no puedes perderte?
La palabra cenote proviene de dzonoot y significa “hoyo con agua”. En la antigüedad, los cenotes eran considerados como sagrados, ya que los mayas podían comunicarse con las deidades del agua, hacer rituales, sacrificios, y además eran considerados como puerta hacia el inframundo.
¿Cuántos tipos de cenotes puedes encontrar en México?
La Riviera maya y la península de Yucatán tienen innumerables cenotes, y dependiendo de su edad es su característica, así es, estos pueden ser abiertos, semiabiertos o dentro de una caverna. ¿Cómo es cada uno?
- Cenotes abiertos. Estos cenotes son los más viejos, tienen millones de años sobre la Tierra. Se caracterizan porque están en el exterior, sin ningún techo que los cubra. Además, están llenos de mucha vegetación, por lo que verás sus paredes rodeadas de plantas y flores. El más popular es el Gran Cenote, que se encuentra en Chichén Itzá.
- Cenotes semiabiertos. Estos cenotes no están ni tan viejos ni tan jóvenes, digamos que están en una edad madura; son de edad media. Alguna parte de los cenotes estará en la intemperie, y probablemente tengan conexión con otro cenote. Se distinguen por los tonos turquesa de sus aguas y profundidad. Utiliza chaleco salvavidas cuando nades en estos pozos naturales.
- Cenotes en caverna. De toda la variedad de cenotes, los que están en caverna son los más jóvenes. En la antigüedad, éstos eran elegidos por los mayas para realizar sus ceremonias y rituales.
Como se encuentran bajo la tierra, son perfectos para hacer rapel o sacar tu lado aventurero. Están rodeados de estalactitas y estalagmitas, y sus aguas pueden ser o muy cristalinas o muy oscuras.
Los 7 cenotes más bellos y exóticos en México
- Gran Cenote
El Gran Cenote es uno de los cenotes más conocidos en la Riviera Maya, y sobre todo, el más hermoso en Tulum. Este capricho de la naturaleza te hipnotizará con sus aguas verde-azules, rodeado de estalagmitas y estalactitas.
Se divide en dos partes, una abierta y otra cerrada, y algunas zonas están más hondas. Si no sabes nadar, no te preocupes, pueden prestarte chalecos salvavidas. Ya que estarás en Tulum, puedes aprovechar para conocer las zonas arqueológicas o el Cenote Calavera, que está a 3 kilómetros del Gran Cenote.
- Cenote Ik-Kil
Definitivamente, el Cenote Ik-Kil es uno de los cenotes en México que no puedes perderte y que debes agregar en tu viaje cuando vayas a la Península de Yucatán. No sólo es impresionante por su enorme tamaño, sino que nadar ahí es como estar en el paraíso.
La belleza de este cenote es tan cautivadora, que es uno de los más fotografiados del país. Lo mejor, es que este cenote se conecta con la Pirámide de Kukulkán, así podrás visitarla después de tu paseo por el Cenote Ik-Kil.
- Cenote de Santa Bárbara
Hay una variedad de cenotes en México que son muy conocidos, pero también hay otros poco conocidos por los turistas. Y el Cenote de Santa Bárbara es uno de los cenotes en Yucatán que puedes ir a explorar.
Se encuentra en el pueblo de Homún y en él se localizan 3 cenotes semi vírgenes, uno es abierto, otro cerrado, y el tercero semiabierto. Para recorrer estos cenotes puedes hacerlo en bici, una forma muy ecológica, o en una carreta que es jalada por caballos. Dentro de Santa Bárbara hay un restaurante en el que podrás degustar la comida yucateca.
- Cenote Azul
Bacalar es una región que se localiza en Quintana Roo y se le conoce como la laguna de los 7 colores. Si estás en Tulum y quieres visitar el Cenote Azul, sólo tardarás 40 min. Este cenote tiene 30 metros de profundidad y su grandeza, flora y fauna parecen sacados de una pintura.
Si quieres bucear, es necesario que lleves tu propio equipo. Después de nadar en uno de los cenotes en la Riviera Maya más espectaculares, visita el Fuerte de San Felipe y prueba la gastronomía de Bacalar.
- Cenote X-Batún
Existen varios cenotes en México que son un paraíso natural y todo un deleite ancestral. El cenote X-Batún es poco conocido y es uno de los tantos cenotes en Yucatán. Tiene una profundidad de 20 metros y una gran diversidad vegetal y animal.
Tienes la opción de hospedarte en este cenote, ya que hay cabañas o espacio para acampar. Su horario al público es de 7: 00 a.m. – 5:00 p.m y para llegar a él debes tomar la carretera Mérida-Muna. Puedes llegar en autobús, tomándolo desde la central de autobuses de Mérida.
- Cenote Dos Ojos
El Cenote Dos Ojos es uno de los cenotes en Tulum y Playa del Carmen, y lo magnífico es que hallarás 28 cenotes más, y es uno de los ríos subterráneos más largos en el mundo. Este cenote se divide en dos partes: una parte clara, en la que podrás hacer esnórquel y la parte oscura, en la que podrás bucear.
En los distintos cenotes verás fósiles de peces, caracoles, arrecifes de mar, conchas, etc. ¿Cómo puedes llegar? Toma un autobús colectivo de Tulum hacia Playa del Carmen.
- Cenote Noh-Mozón
El Cenote Noh-Mozón es uno de los cenotes en Yucatán que no es tan conocido. Para llegar a él tienes que dirigirte por la carretera de Mérida-Cancún y tomar la desviación que va hacia Acanceh y Tecoh para llegar al pueblo Pixyah.
Este cenote tiene una profundidad de 30 metros, y tiene 3 cuevas en las que podrás bucear. Al ser un cenote abierto, te maravillarás al ver cómo el sol refleja su luz en sus aguas azul turquesa.
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Una maravilla natural con una gran historia ancestral
México es uno de los países que tiene una gran diversidad natural, y sus pozas naturales son todo un espectáculo visual. Los cenotes en México son innumerables, y no sólo son importantes por su belleza, sino por la gran historia que hay detrás de ellos.
Ya que han sido una fuente importante de estudio para comprender la cosmogonía e historia maya. Sumergirte en los cenotes en Yucatán, cenotes en Mérida o en los cenotes en la Riviera maya, te cargará de energía ancestral, además de que te involucrarás con la naturaleza.