La tarjeta multimodal o tarjeta de movilidad integrada de la CDMX te permitirá trasladarte a través de la nueva Línea 1 de Cablebús en la Gustavo A Madero.
La Ley de Movilidad de la CDMX ha sido modificada para perseguir y castigar la mezcla de alcohol y volante, o de volante y teléfono celular, mediante suspensiones a las licencias de conducir.
En específico, el conducir bajo la influencia de sustancias o en estado de embriaguez acarrea suspensiones de licencias de conducir que van desde uno hasta los tres años dependiendo si el infractor o la infractora son reincidentes. Ser infraccionado por este motivo por primera vez involucra una suspensión de un año, mientras que la segunda infracción involucra tres años de suspensión más terapia contra las adicciones.
Asimismo se vuelven más estrictas las sanciones para personas conductoras de transporte público cuyos actos ocasionen accidentes de tránsito bajo el código de derecho penal. Es decir que se agravan los castigos para conductores responsables de los delitos de homicidio culposo o lesiones.
Las reformas a la Ley de Movilidad también obligan a los vehículos del transporte público a contratar seguros por un monto superior a los cuatro millones de pesos con el propósito de cubrir cualquier daño contra la propiedad privada y la vía pública.
Ahora, las personas oficiales de tránsito están facultadas para retener la licencia de manejo cuando quien conduce falla o reprueba los exámenes de alcoholemia: el famoso “alcoholímetro”.
Uno de los aspectos más novedosos de las reformas ha sido el de incluir la invasión a ciclovías como un agravante para dictaminar sanciones más severas: el ciclista ve así cómo sus derechos comienzan a salvaguardarse más y más frente al conductor de vehículos motorizados. Otro agravante es manejar y usar el teléfono móvil.
Poniendo la suspensión de licencias de conducir como mecanismo de promoción de seguridad vial y responsabilidad al volante, la ley de Movilidad de la CDMX busca beneficiar sobre todo a las personas jóvenes.
Y es que en México fallecen diariamente 22 personas de entre 15 y 29 años a causa de accidentes viales: fomentar la conducción segura es responsabilidad de, y beneficia, a la población joven.
Finalmente, quienes deben ejecutar y verificar el cumplimiento de estas modificaciones con base a reglamento son el personal de la Secretaría de Movilidad (Semovi) de la CDMX.