¿Cómo los autobuses autónomos están cambiando el transporte público?
Los autobuses autónomos o autobuses sin conductor, que por lo general también son eléctricos, se presentan como una alternativa para ciudades densamente pobladas y cuyas autoridades ven en la modernización del transporte público la solución para reducir el tráfico y contaminación.
Según voces autorizadas en innovación tecnológica de transporte público, como la del directivo de la empresa alemana Siemens, Roland Busch, fabricar autobuses diseñados para ser conducidos manualmente implica desaprovechar hasta el 15% de espacio disponible que podría usarse para aumentar la capacidad de pasajeros al interior de un autobús sin conductor. Asimismo, usar conductor eleva costos de operación que podrían ahorrarse mediante una plataforma de movilidad combinando autobuses autónomos y autobuses eléctricos.
Ahora bien, el autobús sin conductor, de cero emisiones, como tendencia del transporte público y del transporte urbano no cesa en su avance en Europa y en Asia con nuevos prototipos que logran alcanzar velocidades de 80 kilómetros por hora y con capacidad de hasta 80 pasajeros.
Revisemos algunos ejemplos globales:
1. Autobuses autónomos ‘Made in Germany’: Rivium y su innovación europea
Se trata de un autobús sin conductor que ya opera como programa piloto en la ciudad de Rotterdam, Holanda, y en el aeropuerto de Bruselas, Bélgica. Con capacidad para diez pasajeros, Rivium es un autobús eléctrico desarrollado por la empresa alemana ZF Technologies, líder en el ramo de autobuses autónomos que además tiene presencia en México.
En Rotterdam, que hace zona conurbada con La Haya (Den Haag), Rivium recorre un trayecto menor a tres kilómetros dado que la legislación de la Unión Europea impone límites a los vehículos autónomos. ZF Technologies sigue trabajando junto con otras empresas de innovación tecnológica en transporte público especializadas en soporte informático, como Nvidia e Intel, para ir afinando la movilidad de este autobús autónomo en cuanto a vibración y bolsas de aire.
2. Volvo piensa en grande con autobús sin conductor en Singapur
Hablamos de un ambicioso proyecto de transporte público que incorpora la capacidad de pasajeros (80) y la velocidad (hasta 80 km/h) de un autobús con motor de combustión interna. El Volvo 7900 tiene una longitud de 12 metros y está siendo desarrollado en Singapur en asociación estratégica con la Universidad Tecnológica Nanyang (NTU).
Durante el 2019, el Volvo 7900 fue probado en el campus universitario de la NTU y sus primeros resultados arrojan que este autobús eléctrico de cero emisiones utiliza 80% menos energía que un autobús de diésel. Hablamos pues de un proyecto de movilidad verde, destinado a reducir emisiones de monóxido de carbono.
Las autoridades de transporte en Singapur tienen proyectado aperturar tres rutas de transporte público para este vehículo autónomo en 2022.
3. Nobina, Scania y su programa de autobuses autónomos en Estocolmo
Nobina es el mayor operador de transporte público en los países escandinavos y su posición vanguardista lo llevó a lanzar una serie de pruebas con autobuses sin conductor en el área metropolitana de la capital de Suecia. Serán dos vehículos autónomos los que en breve serán puestos a prueba en rutas regulares luego de que Scania comenzó su producción en 2018.
El programa está contemplado para desarrollarse en dos fases: la primera, sin pasajeros y la segunda, con un supervisor de seguridad para monitorear el correcto funcionamiento del nuevo medio de transporte público con miras a la puesta a punto de una flotilla de vehículos inteligentes. Los modelos se llaman Scania CityWide LF y estarán operando en la zona residencial de Barkarby, a 20 kilómetros del centro de Estocolmo.
Conectarán la zona con una estación de metro próxima y forman parte de un programa más amplio de sistemas BRT, o autobús de tránsito rápido, de cero emisiones.
4. La innovación tecnológica de Irizar en España se pone a punto en Costa del Sol
Del mismo modo, en este 2020 se contempla el inicio de pruebas con autobuses autónomos, que en este caso también son autobuses eléctricos cero emisiones, en Málaga al sur de España. El gigante español Irizar está detrás de la manufactura del proyecto que conectará el puerto con el centro de esta ciudad andaluza, bien conocida por su espectacular y milenario anfiteatro romano. Es la sociedad de transporte público Avanza quien ha logrado obtener la luz verde de la autoridad malacitana en un trazado que recorrerá los mismos carriles designados para autobuses.
El modelo IE de Irizar tiene un modo dual para ser manejado manualmente o para ser manejado de manera autónoma. Es completamente eléctrico y además de tener una longitud de 12 metros tiene acomodo en su interior para 60 pasajeros. Este autobús utilizará un sistema de navegación y posicionamiento de alta precisión que le permite ser monitoreado en tiempo real. En otras palabras, los IE operados por Avanza en alianza con Irizar serán vehículos inteligentes apuntalados por Inteligencia Artificial.
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La innovación tecnológica que nos permite hablar de vehículos autónomos para solucionar problemas de transporte público como tráfico y contaminación continúa su avance. Desde Estocolmo hasta Málaga pasando por Rotterdam, los autobuses autónomos siguen siendo probados a espera de que la legislación se ponga a par con la tecnología.
¿Has subido a un autobús autónomo, o escuchado experiencias de algún amigo? ¿En dónde y cómo fue? ¿Qué opinas, subirías a un vehículo sin conductor?